Búscame.

Búscame cuando aprendas a no cometer errores fuertes y negarlos con alcohol. Cuando el amarme no sea un pasatiempo de segunda y el camuflarte en mi sombra no sea por necesidad. Cuando nadie te diga como debo actuar para estar acorde a tus principios. Cuando nadie se acuerde de mi, ni de mis derrotas, ni lo de lo cruel que fui. Búscame cuando te falle en tus narices y no seas capaz de decírmelo. Cuando todo te diga que sí, te mentí; y tu de segado te quedes en silencio.

 ¡Búscame cuando te salga la voz ! !cuando grites ella es mía!  !Cuando no sea yo quien te enseñe de amor!

Cuando no destruyas más los sueños rotos ni esperances más mentiras.

Búscame cuando te hayan amado y perdido varias veces, cuando te hayan pisoteado, cuando te hayan mentido, cuando te destruyan el cielo, cuando te corten la ilusión, cuando te sean infiel, cuando se acuesten contigo y con más hombres a la vez, cuando te griten en la cara el desamor que te tuvieron.  Ahí búscame y entenderás porque no soy yo la que da el primer paso.

Cuando no te resignes. Cuando de verdad tengas tiempo para mí.

Búscame cuando tus letras no sólo hablen de ti, cuando no odies el dolor.

Búscame cuando aprendas a mentir.

Cuando la paz me guíe, cuando mi rostro dañino termine de afear, cuando mis fuertes piernas atenúen , cuando mis manos ya no puedan escribir, cuando mi actitud sea basada en mentiras, cuando el mirar de reojo sea por mero recelo. Cuando mis letras sean malas, ahí me encontraras.

 Sólo búscame. Quizás te esperaré.